Planes traviesos

*Cambio de perspectiva, Jin*
Miré una vez más con una sonrisa burlona el rostro enfadado de la estúpida zorro. Hice una última reverencia de pie ante el emperador inmortal y me dirigí de nuevo a mi asiento. En cuanto me senté esperé hasta que ella se situó en el suyo justo frente a mi y alcé un copa hacia ella, divertio ante su irritación. Le hice un gesto de brindis y su mirada se estrecho peligrosamente, su ceño fruncido y su tonto intento de parecer amenazadora, resultaba interesante.

—Mi señor, ¿realmente la llevaremos con nosotros a la frontera? — pregunto discretamente Cheng Yu.
—En un principio no tenía el más mínimo interés de cuidar de una mocosa. Sin embargo...

Miré mi copa con una media sonrisa. Mientras bebía un sirviente anunció la entrada de los novios. Algo en esta extraña e indeseada situación me aseguraba diversión.

—¿Sin embargo? — pregunto con curiosidad, insistiendo en una respuesta, le mire ligeramente antes de volver a mirar mi copa.
—Creo que podría resultar divertido jugar un poco con ese pequeño zorro. Además, dadas las circunstancias no puedo negarme, es una orden del emperador inmortal ¿no te has dado cuenta de como me ha presionado en público? ha sido esa mocosa la que casi muere por voluntad propia, sin embargo me han querido culpar a sabiendas, así que el asunto no es tan simple… por otro lado, no será difícil cuidar de un zorro salvaje. Dale un palo y será feliz.

<< Estoy seguro de que hay algo mas detrás de todo esto… Ye Qing Xuan ¿tanto quieres librarte de esa mocosa? ¿Qué planeas emperador inútil? Tienes suerte de que no me convenga cortarte el cuello… >> Mis fríos ojos se fijaron en el perfil del emperador con un deje oscuro, con indiferencia le pedí a Cheng Yu que rellenara mi copa, aunque su cabeza parecía seguir dándole vueltas al asunto.

—¿De verdad vas a regalarle un palo maestro? — pregunto con un gesto bobo sosteniendo la jarra del vino aun en las manos, me palmee exasperado la frente.

Miré a mi sirviente nuevamente mientras el me miraba expectante y curioso, negué suavemente con la cabeza << Tantos años a mi lado y sigue teniendo un cerebro tan lento… pollo con cerebro de chorlito >> suspire pesadamente antes de explicarle lentamente.

—No es eso, me refiero a que es obstinada y de mente simple. Sabré cómo manejarla para que no de problemas. Después de todo si la dejo a su libre albedrío y sobrepasa los límites de la frontera, no puedo garantizar su seguridad — dije frunciendo el ceño.
—Ciertamente si eso llegara a pasar, sufriría un mal rato con los demonios.
—Sí, la frontera entre el reino inmortal y el reino de los demonios siempre ha sido un campo de guerra, cruel y despiadado donde las espadas no tienen ojos, es un muy lugar inestable, continuamente batallas.
—Definitivamente con el nivel de la señorita, será mejor que no se acerque — dijo asintiendo seriamente.
—Se la comerían viva, con eso me refiero a que estaría muerta incluso antes de pestañear. Por eso una vez lleguemos tienes que cuidar de ella.
—¡¿Yo?! — dijo negando con la cabeza cómicamente, en un instante sudaba frio y los nervios se lo comían.
—Si, eso he dicho, tu vigilaras a esa mocosa. Pero hazlo en secreto con lo testaruda que es, dudo que no monte un escándalo.
.
—Pero mi señor, yo… nunca he cuidado de nadie. Me temo que no puedo hacerlo.
—Vamos no es tan difícil. Solo vigílala para que no se meta en problemas, si pasa algo que no puedas manejar, me avisas, recuerda, solo cuando la situación se salga de control.
—¿Porque solo en esas condiciones?
—Porque no quiero involucrarme más de lo necesario con ese zorro. Su incompetencia me irrita, dándose aires de grandeza con semejante nivel, hmf.
—Pero parece que es muy agradable y además es muy guapa ¿no has aceptado como discípula también maestro?
—Eso es solo en la superficie, aun no la he reconocido formalmente como discípula, tiene mal carácter y también es débil, además carece de cerebro, igual que tú.
—Mmm, ya veo — dijo con aire pensativo sin haberse percatado de mis ultimas palabras, sonreí mientras bebía de mi copa.
—¡Espere, maestro no debería insultarme así! ¡no se burle de mi!
—Basta, compórtate, que la ceremonia ya ha empezado.

*Cambio de perspectiva, Yue*

—¡¿Cómo se atreve a humillarme de esa manera?! ese estúpido pájaro inútil… ¡espera que lleguemos a la frontera, seguro que consigo vengarme! — dije muy enfadada mientras veía como bebía burlonamente a mi salud.
—Señorita, no debería hablar así ¿qué pasa si alguien la escucha? — trato de calmarme Rou Rou, mi sirvienta personal.
—¿Qué pasa si alguien me escucha? ¿no has oído al emperador? vamos a irnos a la frontera, lejos de aquí ¿sabes cuanto cuesta ascender Rou Rou? ¿y cuanto llegar a dios dorado?
—¿Muy poquito? — dijo con una sonrisa esperanzada.
—Muchísimo, apenas estoy en la primera etapa de medio inmortal. La escala va; medio inmortal, inmortal, inmortal intermedio, inmortal maestro, inmortal blanco, inmortal iluminado, deidad, deidad intermedia, gran deidad, deidad taimada, deidad brillante, deidad terrestre, deidad dorada, gran deidad de oro, deidad celestial y deidad suprema. Sin contar que hay que ir subiendo nueve estrellas, después romper el cuello de botella de esas nueve hacia el siguiente nivel y entre estas nueve hay tres etapas, etapa inicial, etapa intermedia y etapa tardía, ese sirviente de Xu Jin por ejemplo, dijo que era un inmortal intermedio de nueve estrellas, eso significa que esta en la etapa tardía de inmortal intermedio y está por romper la barrera del siguiente nivel.
—Tantos rangos, estrellas y etapas, cultivar es algo que me alegro de no hacer, estoy bien siendo una simple inmortal.
—¿Ahora lo entiendes? Teniendo en cuenta mi lento proceso de cultivo, se podría decir que no vamos a volver en media vida ¿qué importa si alguien escucha mis planes de venganza con ese maldito pájaro? nadie lo recordará cuando vuelva.
—Señorita… ¿estás triste? — dijo mirándome con preocupación mientras yo tenia la a perdida en la entrada de los novios.
—¡Saluda al cielo y a la tierra! — dijo el oficiante inmortal de la ceremonia dando iniciando a la ceremonia.
—No hablemos mas, ya ha empezado la ceremonia, Xiu Qing ¿crees que estará feliz al haber obtenido lo que tanto deseaba? — dije con suma tristeza…
—Yo creo que mi señorita se vería mil veces mejor que esa bruja roba maridos.
—¡No digas eso! ¿quieres que te castiguen antes de irnos? — mire con preocupación a nuestro alrededor, no quería que castigaran a Rou Rou.
—Lo siento mi señorita, se que los sirvientes no deben hablar mal de la realeza pero solo he dicho la verdad.
—Tu, pequeña pilla — le di un juguetón toquecito en la punta de su nariz.