Capítulo 38: Sombras del Pasado

Pasaron varias semanas antes de que Torres y el grupo pudieran organizarse lo suficiente como para dar los primeros pasos hacia la reconstrucción de Valgrís. La ciudad seguía siendo un campo de batalla, aunque sin tiros. Las viejas estructuras de poder ya no existían, pero la lucha interna era feroz.

Un día, Torres recibió una llamada que no esperaba. Era un viejo amigo, alguien con el que había luchado durante años bajo el yugo del gobierno. La voz del otro lado de la línea estaba cargada de desesperación.

"Torres, no sé cuánto más podamos soportar. Algunos de los antiguos seguidores del gobierno están comenzando a organizarse. Hay rumores de que quieren recuperar el control."

Torres escuchó en silencio, analizando la información. Sabía que esta era la parte más peligrosa del proceso. Si el vacío de poder no se llenaba con el liderazgo adecuado, cualquier grupo podría aprovechar la oportunidad.

"Prepárate", dijo Torres finalmente. "Si intentan tomar el control, los detendremos. Pero no será con más sangre. Tendremos que ser más astutos que ellos."

El antiguo amigo le agradeció y terminó la llamada. Torres quedó mirando el teléfono durante unos segundos, pensando en las decisiones que aún tenía que tomar. El peso de la ciudad y su futuro estaba sobre sus hombros.

"Es solo el comienzo", murmuró para sí mismo.