Mi Feliz matrimonio forzado

Lo que para cualquiera sería una condena al ser obligada a casarse con un hombre que no ama, para Amelia resulta ser lo mejor.

Cansada de vivir agobiada por las cuentas, de su familia, y sus padres, que no dejan de mimar a su antipática prima; acepta casarse con Heriberto Salazar, uno de los hombres más ricos del planeta.

No le importa que sea un hombre que no conoce, del que se dice que es un engreído y altanero.

A ella solo le interesa una vida tranquila, con dinero seguro y una casa donde pueda dormir sin preocuparse de los gastos.

Por eso este matrimonio, que para ella es la salvación para no morir por exceso de trabajo, para él, en cambio, es una condena.