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Cierto pelinegro corría por los pasillos del instituto de manera sonriente. Esquivando las personas a su paso, teniendo cuidado de no tropezar con nadie, a lo lejos pudo reconocer una espalda delgada y pequeña, entonces su sonrisa creció, había divisado a la distancia a su mejor amigo.

— ¡Yoongi-ah! —grito.

— Oh, Jungkook —Yoongi se giró en dirección al pelinegro.

— ¿Preparado para nuestro viaje de fin de año? —pregunto mientras pasaba su brazo por encima de los hombros del más bajo— Estoy listo para ganarle a los profesores en el torneo —comento animado.

Era la última vez que irían a un viaje con el instituto, pues ya cursaban su último año y pronto dejarían sus vidas escolares atrás. En cada viaje, realizaban un torneo de diversos deportes con los docentes y grados inferiores, por supuesto que Jungkook debía participar y ganar ¡Como siempre!

— ¿Seguro de poder participar? —pregunto preocupado.

— ¡Si! —grito ganadose miradas curiosas— No te preocupes, hermano —Jungkook le tranquilizo— Ya regresé a mi rutina diaria, todo está bien.

Y no mentía, pues ausentarse una semana completa del instituto le había regresado las energías suficientes a su cuerpo. Además de tener a un enfermero exclusivamente para sí mismo, pues Park Jimin, era el enfermero más sexy del mundo, pero claro que no diría eso en frente de su mejor amigo. El viaje resulto ser exitoso, Yoongi en todo el regreso a Seúl había sonreído inmensamente, Namjoon lo había dejado en casa y queriendo darle espacio al pálido para que tuviera una larga conversación con su padre, los primos se marcharon y no se habían visto en el instituto desde aquel día.

Por boca de su precioso novio escucho las mejores noticias, padre e hijo se habían reconciliado y no pudo sentirse más contento ante las lágrimas de felicidad de su novio.

— Pero miren a quien tenemos aquí —una voz hablo a sus espaldas— Mi dúo favorito de mejores amigos.

— ¿Tan solo te sientes que tienes que estar detrás de nosotros todo el tiempo? —Yoongi se giró de manera irritada.

— Yoon —Jeon codeo al más bajo.

— ¿Ahora vuelven a ser los mejores amigos de siempre? —pregunto con burla.

— Danos un respiro Kim —Yoongi suspiro— Andando, Kook. Debemos ir a clases.

A pesar de que su mejor amigo se alejará, Jungkook se quedó parado frente a Taehyung, realmente odiaba la idea de tener que presenciar esos confrontamientos todo el tiempo y aunque faltaba poco para finalizar el instituto, aún debían verse todos los días ¿Sería mucho pedir un poco de tranquilidad?

— ¿Qué te sucedió en el cuello? —pregunto el pelirrojo— No me digas que así de fuerte es el sexo con el señor Park —Taehyung metió sus manos a los bolsillos de su pantalón y soltó una risa.

Rodando los ojos, Jungkook simplemente asintió— Perdona por dañar tus ilusiones, pero no. Esto lo obtuve en un accidente, ojalá tuviera que ver con el sexo, pero así no fue.

— ¿Accidente? —pregunto confundido— Por eso faltaste toda la semana pasada —concluyo.

— ¡Bingo! —suspiro— Yoongi me contó de sus discusiones —dijo cruzándose de brazos— ¿Es necesario tener tantas discusiones? —preguntó.

— Debo confesar que ver la expresión del gatito gruñón es divertido —el pelirrojo metió las manos en el bolsillo de su pantalón— Además, no creas que aún me he rendido contigo, Jungkook.

— Tú no creas que se me olvida que fuiste quien expandió el rumor —el pelinegro camino de manera lenta hacia el más alto— Que fuiste quien quiso chantajearme con esas estúpidas fotos —un paso más y quedaron frente a frente— No quiero recurrir a la violencia, no aún. Pero si me sigues dando motivos, te juro Taehyung, que esta vez no me quedaré de brazos cruzados.

— Sabes que no le temo a tus amenazas —murmuro.

— Deberías —Jungkook respondió de inmediato— Dudo que puedas dañar mi relación con el señor Park, porque ¿Adivina? —pregunto con una sonrisa— A nadie le importa con quien estoy saliendo, si mis padres ya lo saben ¿Qué importa el estúpido comité de padres?

— ¿Quieres ser expulsado poco antes de graduarte? —la mirada de Taehyung parecía perdida— Si es así, con muchísimo gusto puedo ayudarte.

— Kim, Jeon a sus salones —el profesor Mingyu grito.

La tensión había subido y ninguno pensaba moverse de sus posiciones. Taehyung le dedico una sonrisa burlesca y de manera lenta, casi que obligado, dio un paso para dirigirse al salón, chocando su hombro queriendo desafiarlo de alguna manera.

— ¡Jeon! —nuevamente el grito del profesor.

— ¡Ya escuché! —grito.

¡Carajo! Jungkook no quería ganarse un castigo. Trato de relajar su expresión, su cuerpo se sentía tensionado y se sorprendía la manera del pelirrojo, de hacerlo cambiar su estado de ánimo tan rápido.

— ¿Cómo acabas de responder? —pregunto el mayor.

— Disculpe, profesor —el pelinegro respondió entre dientes, no lograba tranquilizarse.

— A tú salón —pronuncio de manera autoritaria.

Y con el dolor en su mandíbula de tanto apretarla, se dirigió a pasos fuertes hacia su aula de clases. Yoongi se encontraba mirando hacia la ventana, evitando que su mirada de cruzará con Taehyung y lo entendía. Ingreso al salón, ignorando cierta persona que lo observaba de manera fija y se sentó bruscamente al lado de su mejor amigo.

Podía sentir una leve molestia en su cuello y no pudo evitar llevar su mano hacia donde sentía esas horribles punzadas. Llevar la venda en su cuello era incomodo, por lo que opto por utilizar una cinta tape, que era más cómoda y no se sentía tanto.

— ¿Sucedió algo? —pregunto Yoongi a su lado.

— Taehyung me saca de mis casillas —respondió entre dientes.

— ¿Apenas te das cuenta? —pregunto con burla— Quiero romperle los dientes a ese imbécil. No entiendo cuál es la obsesión que tiene contigo, no eres tan guapo.

Aquello hizo que Jeon soltará una ruidosa carcajada ¿Qué no era tan guapo? — Eso no me dice tú padre cuando dormimos juntos todas las noches —comento de manera risueña.