CAPÍTULO 21

Alexandra

Me remuevo incómoda en la manta mientras miro a Flor servirse un vino tinto relajada, ¿cómo diablos se puede relajar esta mujer cuando yo me estoy muriendo del nervio, tengo un mal presentimiento y algo no me cuadra. Flor bebe del vino para luego despegar la copa de sus labios y comenzar a hablar...


 

Danton Black

Frente a un plano de la frontera hibrida nos encontrábamos Tyler mi beta rey y su compañera Roxana que no me tiene completamente contento el que ella haya sabido del plan de mi mate y lo haya ocultado todo, sino hubiera sido por la detención de mi beta rey ella estaría en el calabozo más recóndito.

Ya se ha organizado un plan que no puede fallar, Flor me dio aviso de un plan de Sadock con intenciones de atacar, también me comento que la mejor opción para rescatarla es en una emboscada espontanea justo hoy que tiene un supuesto día de campo organizado, tengo que ir por Alexandra antes de su cabeza ruede hasta mis pies a causa de Sadock.

Mi mandíbula se tensa al solo pensar esa escena tan devastadora.

No quiero arriesgar a la gente de mi manada, esto es una guerra tan grande y necesitamos a gente casi indestructible para esta batalla, así que cuando mi hermana me ofreció la ayuda de un viejo amigo que para mi sorpresa es mi otro estúpido enemigo: el rey de los demonios; me negué al instante, fueron aproximadamente más de un día de terquedad.

Pero cuando el mismísimo rey demonio vino aquí a mi casa con mi hermana y a decirme que si no recibía su ayuda podía ver la cabeza de mi mate rodar he quedado un tanto traumado con la situación.

Aprieto la pelota antiestrés que estoy a punto de reventar con mis dedos, mientras escucho la repetición del plan por tercera vez.

—Tenemos que ir por ella antes de que la mate —dice Roxana preocupada a lo que me hace girar mi cabeza a su dirección y darle la peor cara de odio.

Ya que por su culpa está en esa situación y según Flor Sadock la quiere matar justo en ese día de campo.


 

Alexandra

—Bueno, Alexandra —suspiró mientras meneaba el vino con su mano —, no te espantes ni nada. Hoy te vas con tu amado marido —fruncí el entrecejo ya que no le entendía —, el Alpha rey —me dice al leer mi expresión de condición —, estoy de su lado, ¿por qué? Simple y sencillo; por venganza —la vi beber otra vez del vino, pero esta vez dándose un trago más largo, despegó la copa y dijo —: amo a Aron, pero él prefiere darle el gusto a su padre de cumplir con una venganza dejándome a mí como un trozo de estiércol, ignorándome y haciéndome a un lado porque solo soy una simple bruja mitad vampiro que es sirvienta.

La miré sorprendida por todo lo que me dijo de sopetón.

—Y por tu cara veo que no entiendes porque no te he matado a ti —me regala una sonrisa —, al principio cuando me enteré de que Aron consigo su eterna lo único que pensaba era en acabar contigo, masacrarte, desgarrarte o hacerte un e hizo y llenarte de cucarachas el estómago, quemar...

—Entendí —le dije un poco tensa y ella sacudió la cabeza sonriendo con melancolía.

—Te odiaba, pero luego, un día limpiando escuche que Sadock tenía planes de matarte cuando estuvieras aquí, Aron no se negó ante las exigencias de su padre y eso me produjo más rabia, ni siquiera por ti eres su supuesta "media naranja" —hizo comillas con los dedos de la mano que no sostenía la copa —, te quería proteger, y a pesar de que te quisieran matar las cosas conmigo no iban a cambiar, Aron me seguía tratando como sirviente y basura cada que su padre estaba cerca y cuando su padre no lo estaba lo más que hacía mirarme de reojo.

No tengo ni idea en qué momento sus ojos comenzaron a desatar lágrimas que fue limpiando con el dorso de su mano.

—No puedo matar a Sadock, es un vampiro muy viejo y especial —toma la botella y vuelve a servirse —, pero Danton me dijo que traería a alguien que sí podría acabar con él y tal vez con Aron de paso.

—Siento mucho por todo lo que has pasado —tomó su mano y con mi pulgar le doy un leve masaje —, todo estará mejor, te prometo que... —el piso comenzó a retumbar —. ¿Qué sucede?

—Llegaron todos.

—¿Como que todos?

—Danton y Dereck.

Me quedé en silencio, impactado por lo que acabo de escuchar, ¿Dereck? ¿El rey de los demonios? ¿Danton ya sabe que sale con su hermana?

Me levanté lo más rápido que pude la manta cuando un ejército lleno el terreno, hombres lobos y demonios nos rodeaban y yo no paraba de ver el escenario estupefacta, joder, son muchos, son tantos como para una guerra. Trago saliva al darme cuenta de lo que está pasando, se avecina una guerra y todo por mi culpa.

Siento como me jalan para después tomarme de la cadera y mandarme al hombro de un cuerpo grande y duro.