CAPÍTULO 43

Alexandra

Como era costumbre yo me levantaba, me frotaba los ojos y bostezaba, Danton me acariciaba el cabello, me besaba los labios y me atraía más a él para quedar yo arriba mientras me abraza, como algo cotidiano siempre le daba besitos en la cara para que se despertara y eso solo pasaba si estaba de buen humor, las otras veces más bien lo pellizcaba muchas veces para que me soltara lo cual provocaba gruñidos de parte de él. Me hacía mucha gracia verlo enojado todo el día.

Esta vez no fue una ida al baño común como un día común, no, está vez no estaba Danton, yo estaba embarazada y sola.

Mi día empezó con una corrida maratónica en dirección al baño, si, tenía muchas ganas de vomitar todo hasta el cansancio. Esto no me agrada, la sensación de comida vieja combinada con la nueva es muy asquerosa mientras mi estomago se revuelve, estoy sufriendo sola.

Me ponía un poco triste porque no tenía a nadie que me sujetara el cabello mientras vomitaba hasta lo último, pero esta es mi decisión, mi regalo para él el día de la boda, Un hijo. Aunque... también tengo miedo, mucho miedo.

Me levante del piso después de haber soltado todo de mi ser, baje la palanca del inodoro, me acerqué al espejo tomé una liga que estaba cerca y amarre mi cabello en un moño mal hecho, tomé un cepillo de dientes, agregue la pasta dental y comencé con el proceso de lavado.

Ya lavados mis dientes me lave el rostro. El jabón y el agua no fueron capaces de quitar esta cara de arrollada, Parece que no hubiera dormido en dos días, me desgasta.

Me di mi ducha de costumbre, la casa de mi suegra es hermosa, en mi mente comienzan a vagar en como seria vivir con Danton y un pequeño niño o niña corriendo por ahí, suelto un suspiro en la regadera llevo mis manos hacia mi estómago.

Solo de imaginarme tener a un pequeño bebé entre mis brazos me hace un poco de ilusión y no tengo ni idea porque lo que si tengo claro es que, pero me arrime el pecho, un mini Danton, joder, que fuerte.

Danton... ese idiota se me cruza por la mente todos los días, que estará haciendo ahora me pregunto si de verdad está tan enojado conmigo como para no querer hablarme.

Salí de mi ducha y me dirijo a el vestidor, tomé la ropa de Danton, cuando pase junto la ropa de su ex mis nervios se alteraron y me llené de adrenalina que agarre toda su ropa y la tire al piso destronando todo, cuando todo estuvo hecho un desastre me levante sonriente y caminé fuera de la habitación para saciar mi hambre.

Al momento de abrir la puerta me topo con la cara de Valentino y mi suegra ya esperándome listos para salir.

—Cariño, ya está todo listo. Los guardias, el auto, y todas las citas que agendo Valentino para hoy ya que nos están esperando —le regalo una sonrisa.

—¿No habían dicho que desde casa se podía hacer todo? —pregunte.

—Claro mamá sexy, pero si tenemos un mes ¿por qué no salir un rato? —me respondió Valentino.

—Bueno, ¿entonces que esperamos? —dice Beatriz para después enganchar su brazo con el mío al igual que Valentino, pero del otro brazo.



 

Danton

Solo, en la puta casa solo. Me dejo, se quedó con mi madre a saber qué cosa estarán haciendo. Se supone que ya nos habíamos arreglado, se supone que todo estaba bien, ¿por qué mierda se quiso quedar? Matt estaba alterado al no tenerla cerca, desde qué pasó lo de Amelia he preferido tenerla conmigo ya que no sabría qué pasaría de mi si la pierdo a ella también, no corre riesgo en casa de mis padres, pero prefiero prevenir.

Creo que la estoy volviendo mi dependencia personal, esa niña es capaz de volverme loco en intentos de llamar mi atención, ¿ahora por qué se quedó?
 

<<Matt>>

•Danton, no creo ser capaz de aguantar un mes sin verla —se queja por quinta vez ya y él ya me esta comenzado a hartar.

Si mi madre me llamo y me dijo que no la iba a ver en un mes y si me acercaba a ella pues no me iba a recibir y era capaz de esconderla en el trasero del mundo si era necesario, vaya que maravilla, al Alpha rey lo regañaron y lo sacaron de un lugar, de su antigua casa, se supone que yo puedo estar donde quiera y cuando quiera.

•Todavía no comprendo que intenta hacer nuestra madre —vuelve a hablar.

•yo tampoco, pero no podemos dejar nuestras obligaciones de alpha Rey tememos muchos dictámenes que escuchar, muchas cosas que hacer. Nos vamos a volver locos —le digo paseando mi mano por el pelo.

•en eso si tienes razón.

Este lugar no es nada sin ella y a pesar de que este lleno de gente y Rosita no es lo mismo, no siento lo mismo.



 

En otro lugar...

Xxx.

Desde que ocurrió la guerra entre las manadas de hombre lobo y vampiro ocasionada por un capricho estúpido de Danton (una niña infantil), solo por ella, esa maldita mocosa engreída se cree la luna reina. Hace unos meses me enteré de la muerte del padre de Aron, entonces decidí emprender un viaje hacia el lugar donde se encontraba Aron con su querida flor. Pero todo fue en vano porque me notificaron que él había regresado al reino vampiro para posicionarse en su trono.

Necesito la libertad, necesito escuchar de su boca asquerosa que por fin soy libre y que ya no tengo porqué esconderme más y fingir. Ya quiero acercarme al amor de mi vida. Y no te preocupes Danton voy por ti. Quiero amarte, besarte sin límites y barreras, eres mío y me perteneces.

Toque la puerta de la oficina de Aron, a respuesta escuche un pase.

Me adentré y todo seguía completamente igual que la última vez que había venido. Ese día sucio y apestoso que me arruinó toda la vida, el di en que me arrebataron mi felicidad exponiéndome a años de sufrimiento.