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-Llegamos- susurro Klaus cuando pasaban la entrada. Lo cual significaba que el se quedaría mudo hasta que estuvieran de nuevo solos. Avanzaron y descendieron de los caballos, para después llevarlos al establo, no sin antes buscar señales de compañía. Cosa que resultó afirmativa hasta que llegaron y encontraron a Eric y Claude terminando con sus caballos.
-¿Ustedes también salieron? Se ve que practicaron- sonrió Claude al verlos, más que nada porque ya quería cambiar un poco su humor.
-Si practicamos algo, pensamos que sería buena idea. Además de estar algo alejados para no alarmar a mi padre y causar inconvenientes- sonrió Jules acariciando a Nerón.
-Se ve que fue un día muy productivo también para ustedes ¿Mañana te gustaría acompañarnos Jules?- pregunto Claude recibiendo enojo de parte de Eric y sorpresa de Jules y Klaus. Aunque el sabía que se negaría por Eric.
-Lamento denegar la oferta, honestamente no sé si mi padre requerirá de mi. Con eso de que Eric si marcha y era su mano derecha, puede que me pida ayuda. Y de todos modos, ya tenía planes para mañana por si andaba libre- contesto Jules apenado.
-No hay problema y tienes mucha razón. Deberías estar cerca de el, mínimo uno de ustedes debe de hacerlo- acepto Claude y de parte de Eric se notaba que apenas recordaba ese punto.
-¿Aun sigue el plan de mañana?- pregunto Claude viendo a Eric. El cual rápidamente cambio su actitud a la normal.
-Sigue el plan, pero no olviden que mañana hay misa y hay que asistir- contesto y se marchó.
-El no tiene remedio- rio Claude y se marchó. Aunque se encontró con Dastan en el camino.

-Hola- sonrió y fue a verle.
-¿Que tienes?- pregunto serio mientras iban a la cocina.
-¿A qué viene tu pregunta?
-¿Te fue mal con Eric o en el establo?- sonrió ligeramente.
-Eric sabes que es alguien difícil de lidiar, la cosa se pone peor cuando Jules aparece. El día de hoy la cosa siguió muy bien, ellos llegaron Jules dijo algo, lo molesto y se marchó.
-No me sorprende, ese par desde que Jules se alejo y Eric supo el motivo sin que esté se escondiera, la cosa se complicó más.
-¿Cómo? Eric me cuenta pero solo lo que el quiere, que es prácticamente odio a su hermano.
-Un día... Bueno varias veces, Jules le ha dicho a Eric lo que el y su padre le provocan. En una de esas el admitió que los deseaba muertos- contesto dejando a Claude con sorpresa.
-Eric siente lo mismo, solo que creo que el quiere muerto a Jules y no le importa el precio. Mientras que Jules lo desea pero sabe tener límites, por eso aunque pueda matarlos no lo hace- se quedó pensando Claude.
-Jules tiene muy buenos principios, será difícil que estos desaparezcan.
-Recuerdo un chico, quería ser un mosquetero. Un héroe, quería demostrarle al mundo de lo que vale. Quería continuar con su legado- paro para ver la reacción de Dastan. El cual bajo la mirada, pensando únicamente en como antes Gustave usaba algo así para lastimarlo.
-Odio en que te transformó Gustave, ni se si estás llorando o feliz. Luego solo te he visto el rostro una vez y honestamente así no eras. Jamás te hubiera visto asi- miro a su amigo, el cual se dió cuenta que estaba llorando.
-Ire a...- se marchó mientras Claude dejaba que se fuera. Todo mientras recordaba como todos se imaginaban que el sería cuando fuera mayor. El debería estar siguiendo sus sueño y no vivir pesadillas. Haciendo que sintiera pena y deseara que algo hiciera un gran cambio.
Cosa que veía lejana, porque Renoir ya se había dado por vencido y el era el espía oficil ahí. Mientras el se podría decir que se había escapado de su casa para llegar a estás tierras a buscar a su mejor amigo de la infancia. Solo dejando a su familia con la promesa de que lo encontraría y todos se volverían a ver de nuevo.