Capítulo 19

Mujer

Mujer, qué fácil eres, despliegas tus alitas como si no te dieras cuenta de que te están despojando del alma. Ella canta a su amado, y su amado no la escucha; esta mujer danza como lo hace el viento y se siente un ser diferente en este mundo tan indiferente.

Mujer singular y peculiar, miras al cielo y lo comparas con unos ojos que no te reparan. Eres música para mis oídos, hermosa en todos tus defectos y virtudes. Me encanta cuando cantas sola en tu habitación esas alabanzas que llenan tu corazón de una nueva esperanza.

Esta mujer no conoce el miedo y se ríe de lo que está por venir; es fuerte y, a veces, escandalosa. Ama más que cualquier otra persona, porque su amor emana desde lo más profundo de su ser. Tiene una debilidad: ama mucho más que a sí misma, y a menudo se encuentra entregándolo todo sin preocuparse por ella.

Sin embargo, esta mujer es formidable porque tiene a un Dios que la protege; ese Dios es Jesucristo, y todos deberían temerle. Ese León la cuida día y noche, le canta canciones y dibuja sonrisas en su hermoso rostro. ¡Oh, esta mujer sí que es fuerte!

Esta mujer te observa y desea ofrecerte todo su amor incondicional. ¿Puedes verla? Mírala, qué hermosa ríe a carcajadas con confianza. ¿No ves su belleza? Ella daría un mundo entero por solo verte feliz. Esta mujer está dispuesta a hacer cualquier sacrificio por el amor verdadero.

A esta mujer le fascina la creación de su Dios y no se cansa de agradecer por las aves tan hermosas y por el río que serpentea cerca de su hogar.

Mujer de lindos vestidos y faldas largas, te ves hermosa cuando tus labios de carmín son pintados. ¿No ves lo hermosa que eres? Todos los días clama a su Dios y lee la Palabra que su Padre ha dejado para ella; con devoción y amor la estudia, imaginando la voz de su Padre resonando como un trueno en la tarde.

Hermosa mujer que, a veces, disfruta correr y gritar como una niña pequeña; sus sentimientos son los de una infante que anhela amor y protección. Sin embargo, nadie la cuida, solo Dios. Ella siente más intensamente que cualquiera a su alrededor y, en ocasiones, teme el rechazo y el dolor que podría atravesar su corazón. Esta mujer espera a un hombre que la defienda de todo y de todos, como esos romances que tanto le gusta leer.

Mujer de hermosos ojos saltones y cabellos castaños, a veces se siente triste y solo sonríe. ¿No la ves? Ella ama, pero necesita aprender a amarse.

Mujer que camina descalza en la madrugada, a veces llorando porque anhela compañía. ¿Te quedarías con ella en esas noches?

Mujer fuerte y delicada, mujer que escribe y canta, mujer de otro mundo, pues este es indiferente a su belleza.

Mujer de tinta; su lenguaje son palabras... Y esa mujer escribe este poema, suplicando que reconozcan la verdadera belleza. Mujer de voz delicada... mujer.

Yo soy esa mujer.

Yo: Ámate, porque eres hermosa como las piedras preciosas; quien no lo vea es porque no ha contemplado tu esencia.