XXIV

—¿Yo?¿Drámatica?—le pregunto ligeramente furiosa—¿y tú qué? Tu cara no era precisamente linda, cuando nos empezaron a soltar comentarios… más bien… cuando —“a mí”—me apunto con mis pulgares—me empezaron a soltar comentarios.

—Mi cara es linda—me quedo boquiabierta por su comentario—eso no me preocupa—se lleva la mano al cabello y se lo revolotea.

<<Dioooos, que lindo se ve haciendo eso… Diam, ¡concentrate!>>

 —Ya que somos compañeros de trabajo, tenemos que llevarnos bien, ¿no?

—Sí tú lo dices…

—Diam…

<<Es la primera vez que me llama así>>

—García—oprime el volante con fuerza.

<<¿Ahora me llamará así?>>

—¿Cómo debo llamarle?—pregunto indiferente—oh, disculpe—me vuelvo a verlo—llamarte.

—Gar…

—Preferiría que me llames Dialnet, que mi apellido solo lo usa mi papá.

—Bien—comenta a secas—Ahinoam.

—Muy largo.

—Tú nombre es largo—se detiene ante el semáforo en rojo, veo cruzar a un hombre de traje negro—así que no te quejes de que el mío esta “muy largo”.

—Bueno, bueno, no discutiremos—recargo mi frente en la ventana—no… no… no… no—musito, veo una sentellante luz de un anuncio publicitario, él enciende su toca disco y empieza a sonar una canción que a un familiar mio le gusta mucho.

<< Instant Crush de Daft Punk y Julian Casablancas>>

—¡Ya sé!—me acomodo en el asiento y me vuelvo a verlo—te llamaré “Noa”.

—¿Noa?

—Sí, ¿no te gusta?

—Más bien, nadie me llama así, ni siquiera mis padres o mi…

—¿Ah?—guarda silencio—¿Quién? ¿tu novia?

<<Diam, ¡¿Qué has dicho?!, ¡cierra la boca!>>

—Curioso.

Es lo único que escucho que comenta, ya estamos a pocas cuadras del departamento y ahora estoy apenada y a la vez enojada.

<<¿Qué rayos me esta pasando?>>