CAPITULO 72 EL SECRETO DE LOS SANGRE DE BRUJA

PERSPECTIVA: Rozuel Drayt

El aquelarre Cognitio estaba preparado para pagar la apuesta que habían perdido, todo nuestro equipo estaba en la habitación de nuestros ex-rivales de competencia, Livia quien no estaba enterado sobre aquella reunión que tuvimos Liha y yo con Valee y compañía, se sintió algo frustrada.

—Eres un sangre de bruja desconfiable –Se mofa Livia de mí con una expresión infantil.

—Oye, Liha también lo hizo, ¿por qué solo te desquitas conmigo? –Dije aceptando de mala gana su regaño.

Todos tomamos asiento acomodándonos como la Eldar Laabe Diavantora nos pidió, sobre la mesa se había servido té acompañado de dulce bollos de canela, Allum por su parte estaba inmensamente perdido en el sabor de los bollos que acompaña con una taza con leche. La charla acerca sobre el secreto de los sangre de brujas, había iniciado.

—Antes de continuar, ¿sabes cuál es la diferencia entre un artefacto mágico y un artefacto encantado? –Me pregunta la Eldar.

—Sí, un artefacto mágico es aquel objeto de naturaleza mágica desde su diseño y posterior creación, en cambio un artefacto encantado es un objeto ordinario que ha sido imbuido con magia alterando las propiedades de su composición para luego volverse un objeto mágico, la diferencia entre ambos es que uno está hecho para ser un objeto mágico desde su fabricación y el otro es simplemente un objeto normal que por medio de herrería mágica se le da sus propiedades mágicas –Explique contestando a la pregunta.

—Muy bien, ahora dime, ¿cuál es los dos tipos de artefacto es más fuerte?.

—La respuesta es obvia, un artefacto mágico es más fuerte que uno encantado, su naturaleza mágica desde su creación los hace más adaptable y eficaz para su manejo, por no mencionar que los artefactos mágicos, poseen una composición más complejo en su diseño y los límites de poder mágico que pueden albergar superan con creces a cualquier artefacto encantado.

La Eldar aplaude mi buen conocimiento sobre el tema, elogiándome de ello junto a Valee.

— ¿Por qué me pregunta sobre los artefactos mágicos? –Fue mi turno de ser el de la preguntas.

—Porque, el secreto que los sangre de bruja alberga, tiene como tema central a los artefactos mágicos y encantados –Contesto ella.

—¿Qué quieres decir?.

La Eldar coloco una cuchilla sobre la mesa, un puñal con empuñadora de bronce, la hoja emitía cierta magia denotando su naturaleza.

— ¿Un artefacto mágico? –Pregunte en voz alta.

—En efecto, adelante, recógelo –Me pide ella.

Tome el puñal mirándolo fijamente, comprobando sin duda alguna que se trataba de un artefacto mágico.

—Ahora, mientras sostienes el artefacto mágico, salta e intenta tocar el techo de esta habitación.

— ¿Eh?...

Quise creer que lo dijo era broma, pero la Eldar había hecho una petición totalmente real, saltar y tocar el techo, parecería algo fácil de hacer de no ser por una razón en concreto, ella me pide que lo haga sin usar Intense Iron, es decir, tal y como estaba, mientras sostenía en todo momento el artefacto mágico que ella me entrego.

—Oiga… en serio, ¿es una broma? –Pregunte con inquietud.

—Claro que no, para que puedes entender mejor dicho secreto, es necesario hacer esto -Explico Laabe.

Livia sin decir una palabra tan solo mostraba una expresión en su rostro opinando lo absurdo que era esto, Liha por su parte, con su típico comportamiento optimista de siempre, tan solo observaba mientras disfrutaba del té servido.

Suspire y mi hacia el techo, la distancia que había con el suelo era 1 metro y unos pocos centímetros, actualmente mi estatura era de 125 centímetros, sin Intense Iron para mí era prácticamente imposible saltar tal distancia, pero no perdía nada probando lo que la Eldar sea lo que sea que intentase demostrar.

Centre mi mirada hacia el techo, flexione las piernas y salte llevándome una sorpresa, había realizado un salto lo suficiente alto para llegar al techo, no con lo justo, sino que había realizado un salto con más fuerza de la necesaria y con una velocidad de impulso muy alta a una corta distancia de 1 metro, estaba por darme de lleno contra el mismísimo techo.

Por fortuna, mi rostro impacta no con el techo, sino con una barrera que había absorbido casi toda la fuerza de la embestida de mi cara, dicha barrera fue erigida por uno de los autómatas de Valee, aquella esfera flotante con el ojo de cristal, sentí dolor aunque no mucho, por suerte no estaba herido y caí logrando aterrizar sin problema alguno en el suelo, en todo momento que hice eso, sostuvo el puñal.