Capítulo 50

Vanessa sintió el miedo recorrer sus venas lentamente, nunca imaginó que el peor día de su vida estaría tan cerca de cumplirse. Apretó los puños y respiró profundamente antes de dirigirse a Tomás.

—No esperaba que fuese tan pronto Tomás, no era lo que estaba planeado—

Tomás sonrió perversamente

—Querida los planes cambian de un día para otro , soy una persona muy impredecible —

Tomás intentó acariciarle una mano pero Vanessa la apartó por impulso.

—Estoy cansada , si me permites necesito irme a mi habitación —

La expresión de Tomás se endureció , su mirada fría y penetrante helaba el interior de Vanessa que no podía sostenerle la vista . Tomás se levantó de la silla lentamente y se colocó detrás de Vanessa , se acercó con sutileza al oído y susurró:

—En esta casa yo doy las órdenes querida, cuando yo desee que te levantes de la mesa te lo haré saber , mientras tanto , vas a permanecer ahí sentada , ¿Entendido?—

Vanessa solo pudo tragar en seco al sentir la repugnante respiración de Tomás en su cuello. Tomás al no recibir una respuesta volvió a repetir está vez tomándola del cabello

—¿Entendido? O no queda claro lo que dije—

Vanessa asintió rápidamente para que la soltara del cabello. Una lágrima intentó rodar por sus mejillas para rápidamente la eliminó, no se podía permitir debilidades, mucho menos en frente de su opresor...

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Hugo pasó toda la tarde ensayando lo que diría , pero aún así no encontraba las palabras adecuadas para enfrentarse a sus emociones . Estacionó el auto en frente de una cafetería común , allí , sentada en la última mesa lo esperaba Denmet , se veía nerviosa , o tal vez espectante.

Hugo se adentró en la cafetería, se dirigió al bartender y pidió un café , indicó dónde tenía que servirlo y luego con pasos inseguros se dirigió a la mesa. Denmet lo observó con disimulo , luego se levantó para plasmarle un beso en los labios.

—Tardaste desde que me llamaste para vernos — dijo mientras lo abrazaba .

Hugo se quedó inmóvil por unos segundos, luego respondió al abrazo , Pero sin la misma intensidad.

— Necesitaba organizar mis ideas Denmet , pero ya estoy aquí —

Denmet sintió una descarga negativa dentro de ella. Respiró profundo y tomó asiento, invitando a Hugo a hacer lo mismo.

—Estas muy extraño desde hace días , supongo que sobre eso me hablarás —

—Necesito ser honesto contigo Denmet , creo que es lo mínimo que mereces—

Hugo tomó las manos de Denmet con delicadeza y las acarició. El mesero apareció con el café y lo colocó frente a Hugo para luego retirarse. Hugo prosiguió.

—Antes que nada, quiero que sepas que nunca te mentido sobre mis sentimientos, siento algo muy especial por ti , eso es algo que no puedo negar—

Hugo tragó en seco, Denmet apretó fuertemente las manos de Hugo .

— Eres una chica especial Denmet, tienes un corazón muy noble , y cualquier hombre estaría más que satisfecho con tener a una mujer como tu en su vida —

—Cualquier hombre menos tú, ¿Cierto?—

Denmet apartó bruscamente sus manos y cambió su expresión, una lágrima comenzó a rodar por sus mejillas .

—Denmet yo....—

—Yo se por dónde viene todo esto Hugo, era algo que ya veía aproximarse, lo nuestro siempre fue tan incierto —

Hugo se llevó las manos a la cara en señal de remordimiento.

—Pense que lo podía intentar, pero solo me dí cuenta que mi corazón siempre le va a pertenecer a ella—

Denmet tragó en seco y tomó su cartera para ponerse de pie ...

— Eso es algo que ya sabía—

Se acercó hasta quedar a pocos milímetros del rostro de Hugo , lo miró fijamente, una mirada dura.

— Esa mujer será tu perdición Hugo, intenté advertirte pero no lo logré, cuando te des cuenta ya será demasiado tarde y yo ya no estaré para ti—

Seguidamente se dirigió a la salida de la cafetería, dejando a Hugo sumido en sus pensamientos. Sentía mucha decepción por no haber sido lo que ella esperaba , pero su corazón le indicaba que estaba haciendo lo correcto , en la guerra entre el pensar y el sentir , ya había un ganador...