Capitulo 12

La foto no tardo ni una hora en ser subida mientras Tony bajaba de la tarima encontrando con la mirada a Enzo Venturi junto a su grupo de amigo y una mujer quien estaba demasiado cerca y por las miradas que compartían, Tony entendió.

La mujer es visiblemente mayor le coqueteaba con la mirada permaneciendo cerca de Enzo logrando avivar mas la molestia en su pecho al recordar como encontró a Layla, con paso decidido se acercó hasta el grupo manteniendo un rostro sereno.

—Hey! Hola —todos miraron a Tony expectantes y emocionados.

—hey! ¿Eres el vocalista de The Sud? —Tony solo asintió y algunos estrecharon la mano, pero solo uno de ellos al estrechar su mano se quedó mirando el reloj.

—es… un bonito reloj —Tony extrañado miro su muñeca.

—una amiga y fan me lo regalo —mostro con orgullo el reloj y vio como algunos, sino que todos reconocieron el modelo del reloj.

Un reloj costoso de colección, no muchos fans se lo podían permitir por el costo alto de este, pero se sorprendió de ver que quien pregunto por el no reacciono de la misma manera.

Su mirada se posó en Venturi quien parecía sorprendido e incrédulo.

—debe quererte mucho esa fan —y eso es todo lo que Tony esperaba que dijera.

—sí, Lila, perdón Layla es grandiosa, aunque no estaba destinado para mí, tuve suerte —el rostro de Enzo se tensó mientras la sonrisa de sus labios desaparecía, noto como la sola mención de ese nombre hizo que todos reaccionaran a el en reconocimiento, solo el alto con las lentillas de ojos azules contuvo una risa.

—vaya, es… Layla ¿no? Que suerte

—¿dijiste Lila? ¿no es la chica que nos toma las fotos? —pregunto un rubio preocupado mirando alrededor.

—¿tienen fotógrafa? —cuestiono la mujer sorprendida.

—hace unas tomas increíbles —el rubio se mostró entusiasmado girándose para buscar entre la multitud. —por cierto ¿Dónde está? La vi hace un rato venir hacia acá.

—se… sentía mal y se fue —el de lentillas azules murmuro mirando con una sonrisa de disculpa hacia el rubio, Enzo solo se tensó aún más en su sitio.

—Enzo ¿Por qué no la acompañaste? ¿no es peligroso? —cuestiono otro de los presentes mucho más joven que el resto.

—no soy su papá, ¿tú la viste? —le pregunto directamente a Nico y este asintió lentamente sin mostrarle lo mucho que ahora quería golpear a su amigo.

—sí, pero ella —antes de que pudiera decir alguna excusa Tony hablo con una sonrisa en el rostro.

—vaya… ¿son cercanos? —señalo al grupo y la mayoría asintió con entusiasmo, y es que Layla es capaz de ganarse el cariño de cualquiera con solo verla.

—siempre está por aquí revoloteando—su tono de desdén hizo que entre los presentes dos apretaran los puños y cuando Tony se acercó Nico hizo lo mismo dándole un golpe firme en el hombro.

—no seas así, ella ha ayudado mucho al grupo —lo regaño de manera juguetona su amigo a lo que Tony escuchando su nombre desde lejos solo negó extendiendo la mano hacia Enzo.

—fue un placer conocerte al fin —Enzo extendió su mano estrechándola la de Tony sorprendiéndose cuan fuerte le estaba apretando la mano, se inclinó hacia el hombre con expresión seria.

—espero no verte cerca de ella —murmuro con odio, pero solo Nico y Enzo escucharon.

Tony soltó rápido la mano de Enzo y se marchó, el resto se quedó callado intentando entender que había pasado.

—¿Qué? —Enzo cerro y abrió la mano para intentar disipar el dolor.

—que lo tienes merecido amigo mío —Nico le dio otra palmadita en la espalda esta vez más fuerte y se alejó —ya regreso, debo hacer una llamada. —sacando su celular y marcando el número de Layla pero jamás contesto, en cambio recibió un mensaje.

Lila: estoy viva… pero no quiero hablar.

Nick: me alegra que al menos sigas viva, ¿puedo preguntarte algo?

Lila: dime

Nick: que hiciste con el reloj?

Lila: lo regale ¿Por qué?

Nick: no. por nada, descansa.